Últimamente, lo poco que leo suele ser durante el trayecto en bus a la ciudad, donde siempre llevo un libro para deleite mío y posible arma de defensa ante compañeros de viaje plomizos. Los últimos libros que he leído me han dejado muy buen sabor de boca, deseando muchas veces que la última parada se retrasara un poco más para seguir enfrascada en su lectura. Estos han sido «Tess, la de los d’Urberville» de Thomas Hardy y «Lady Susan» de Jane Austen, al que dedico esta entrada porque me ha sorprendido muy gratamente y me he divertido mucho leyéndolo. Algún día quizás también dedique una entrada a Tess, pues se ha convertido éste en uno de mis libros favoritos.

«Lady Susan» es un relato corto epistolar que escribió Jane Austen cuando tenía 20 años (1795) aunque nunca llegó a publicarlo. Fue muchos años después de su muerte cuando vio la luz del día y se trata de una de sus llamadas «obras menores», signifique esto lo que signifique.

Como es de suponer, el personaje principal es esta Lady Susan, una atractiva viuda de 35 años que sólo piensa en sí misma y en salirse con la suya a través de su hipocresía, maquinaciones y haciendo alarde de sus encantos y elocuencia. Tras un affaire con un hombre casado en la ciudad, decide marcharse a pasar una temporada en el campo en casa de su cuñado, el Sr. Vernon, para acallar las habladurías. Su cuñado es un bonachón que siempre intenta pensar lo mejor de los demás, pero su mujer, la Sra. Vernon, que conoce la reputación de Lady S, no se deja camelar por la falsa simpatía de ésta. El hermano de la Sra. Vernon, Reginald, decide visitarles para conocer a la famosa Lady S, pero con rapidez, él mismo cae bajo el influjo de su belleza, modales y conversación. Por otro lado, tenemos a la hija adolescente de Lady S, Frederica, enviada por su madre a un internado de señoritas y a la que quiere obligar casarse con un joven rico y de buena familia pero necio, al que la pobre niña no soporta.

El relato está creado a base de cartas, las más divertidas, sin dudarlo, son las escritas por Lady Susan a su amiga, la Sra. Johnson, a través de las cuales se expresa tal y como realmente es ella y vemos su verdadera personalidad, detallando sus planes y tejemanejes y soltando cada lindeza que, a pesar de que resulte una mujer detestable, no puedes evitar reírte.

Mi única pega ha sido que se me ha hecho muy corto y me he quedado con ganas de más, porque el librito termina con una conclusión en forma de narración sobre qué fue de los personajes, como si Jane Austen se hubiera cansado de seguir escribiendo a modo de cartas y quisiera acabar deprisa y corriendo la historia.

Pero en general, me ha gustado mucho, y me lo he pasado muy bien leyéndolo. A ver si se deciden a hacer una adaptación al cine, que me extraña que no la haya ya, con semejante personaje como Lady Susan.

Así que si os gusta Jane Austen, no dudéis en leeros Lady Susan y me gustaría dar las gracias a Elizzy por animarme a hacerlo, de lo contrario, aun lo tendría en la estantería acumulando polvo.

FRASES:

LADY SUSAN (a la Sra. Johnson sobre su hija): Algunas madres hubieran insistido en que sus hijas aceptaran tan magnífica oferta en un principio, pero yo no tenía fuerzas para obligar a Frederica a contraer un matrimonio contra el que su corazón se rebelaba; por ese motivo, en lugar de adoptar tan tiránica medida, me propongo simplemente hacerle la vida imposible hasta que, de forma voluntaria, se decida a aceptarlo.

SRA. JOHNSON (a Lady Susan sobre Sir James, pretendiente de Frederica): Lo cierto es que pasamos un rato muy agradable. Sigue tan estúpido como siempre.

LADY SUSAN (a la Sra. Johnson sobre el marido de ésta): ¡qué error cometiste al contraer matrimonio con un hombre de su edad! Suficientemente viejo para ser aburrido, ingobernable y padecer gota; demasiado viejo para ser complaciente, demasiado joven para morir.

LADY SUSAN (a la Sra. Johnson sobre Reginald): No te resultará una compañía aburrida y tienes mi permiso para flirtear con  él cuanto quieras.

LADY SUSAN (a la Sra. Johnson después de que el marido de ésta la prohiba tener amistad con Lady S): … cuando lleguen tiempos mejores, y disfrutes de una independencia como la mía, nuestra intimidad volverá a ser la misma. Esperaré ese momento con impaciencia.